El vuelo de la lenteja

El pasado 7 de junio a las 17:16 despegó del aeropuerto de San Pablo en Sevilla un C295 equipado con un espectacular domo de 6 metros de diámetro, conocido cariñosamente en la casa como 'la lenteja'.

El aparato es un primer prototipo de desarrollo de un proyecto de avión de alerta temprana y de control aerotransportado (Airbone Early Warning and Command o AEW&C) .

El prototipo completó con éxito un vuelo inaugural de unas tres horas, tripulado por el piloto Alejandro Madurga, el copiloto Alfonso de Castro y los ingenieros de ensayos en vuelo Juan José Baeza y Antonio Ojeda. Está prevista una campaña de ensayos que se prolongará unos tres meses para completar el estudio de viabilidad y validar completamente el concepto.

La tripulación del vuelo inaugural.
De izquierda a derecha:
Ojeda, de Castro, Madurga y Baeza
El aparato de serie estará dotado de un rotodomo de rotación rápida con un radar que proporcionará una completa y continua cobertura de 360 grados del área seleccionada. Sin embargo, ' la lenteja' que se utiliza para estas pruebas iniciales es un dummy: una estructura fija que sirve para validar el comportamiento aerodinámico y estructural del avión, y el impacto en las cualidades de manejo.

La estimación es que el C295 AEW&C podría acomodar entre 4 y 6 consolas de operador y acometer misiones de 7-8 horas sin repostar.

No obstante, el programa está aún en fase preliminar de desarrollo, aún no se ha seleccionado el proveedor del sistema de radar, y aún se están considerando opciones como la posibilidad de añadir winglets para aumentar la autonomía del aparato.

No se ha confirmado que haya clientes en firme y Airbus Military no ha tomado una decisión formal sobre el lanzamiento, pero se pretende presentar el prototipo en sociedad durante la feria de Le Bourget.

El proyecto, iniciado en la segunda mitad de 2010 y autofinanciado por Airbus Military, incluye actividades de I+D, pruebas en túnel de viento y estudios para desarrollar internamente el rotodomo que alojará el radar.

Destinado inicialmente a la conversión de un C295, los resultados del estudio podrían tener aplicaciones en futuros desarrollos basados en otras plataformas como el A319 o el A320.

Una iniciativa coherente con la estrategia de Airbus Military de ampliar la gama de derivados militares, y valiente porque busca abrirse un hueco en un nicho en el que ya hay bastante competencia.

Más fotos en este hilo, incluido un chapucero fotomontaje que distribuyó la propia empresa el mes pasado.

La noticia en Flight Global y Aviation Week.